La Escucha y las Problemáticas Sociales Complejas
Lo
que vivimos en la actualidad se construyó hace años en un mundo donde el habla
quedó paradójicamente silenciada, la escucha se tornó confusa y casi imposible.
La pérdida del significado de las palabras construyó nuevas formas de silencio,
de ausencia, especialmente de aquellas personas que fueron ocupando el lugar de
la exclusión. Así, el encuentro, la construcción de lazos sociales y la pertenencia
se tornaron dificultosos, mientras que esto construyó nuevas formas de vida
cotidiana, la escucha quedó olvidada o remitida por pautas marcadas desde
programas y proyectos sociales dejando de lado los vínculos y necesidades
realmente sentidas.
Más
allá de lo que se fue construyendo desde hace décadas, se vive la intensa
necesidad de la inclusión social en el mundo que lentamente va haciendo
retornar el lenguaje, la palabra y la escucha. La misma es posible sólo cuando
quienes la constituyen sienten su pertenencia a un todo integrado, desde la
historia, la cultura, el territorio y los afectos. Esto implica estar donde la
demanda se presenta o puede ser esbozada desde diferentes formas de pedido de
ayuda en terrenos de padecimiento, soledad y desencanto, donde la salud mental
se presenta afectada.
Es
posible interpelar a los problemas actuales en la medida que se escuche, la
institución escuche y desde la intervención profesional sepamos escuchar y
porque no desde nuestra cotidianeidad. Estas cuestiones, de alguna manera
implican la necesidad de generar estrategias de recuperación, es este caso de
la palabra, la mirada y la característica multidimensional del lenguaje. Desde las
prácticas hasta las políticas.
Licenciada en Trabajo Social Alejandra Muñoz.

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